Como marca la tradición, un año más Cáritas Diocesana celebra su Campaña radiofónica, próxima al día de Navidad, en esta ocasión bajo el lema " Únete a la revolución de la ternura". En esta ocasión los días elegidos son el lunes 19 y el martes 20 de diciembre de 19:00 a 21:00 h.
YA LO SABES,
¡CONÉCTATE EN CUALQUIERA DE LAS EMISORAS COPE DIOCESANAS: ASTORGA, BIERZO Y BARCO DE VALDEORRAS!
CARTA DEL SR.OBISPO
Queridos diocesanos:
Cáritas de la Diócesis de Astorga convoca de nuevo una campaña para recoger donativos a fin de atender las necesidades más perentorias de algunas personas que sufren la exclusión social. La recaudación en las anteriores campañas ha sido considerable y gracias a ella se han podido realizar nuevos proyectos solidarios.
Quisiera como obispo y, por tanto, como último responsable de Cáritas en la Diócesis, motivar vuestra generosidad. Es posible que estos días llamen a vuestros corazones muchas personas solicitando vuestra aportación para diversas campañas. Estoy seguro que ninguna podrá presentar una trayectoria tan dilatada en el tiempo como esta de Cáritas. Son ya cincuenta y cuatro años de solidaridad de los diocesanos de Astorga que han sacado adelante proyectos tan importantes como aquellos de los que este año hemos celebrado el cincuenta aniversario. Me refiero al Centro Social Madre de la Iglesia (COSAMAI) y a la Guardería Infantil Nuestra Señora de las Candelas. La aportación de nuestros mayores ha dado fruto y fruto abundante.
Hoy las necesidades son otras. Tenemos ante nosotros una población de inmigrantes que llegan a nuestro país después de pasar muchas penurias. Es cierto que la mejor forma de solucionar este problema es promocionar en los países de origen dignidad, trabajo y progreso. Pero lo cierto es que están aquí y hemos de atenderlos como lo que son: hermanos. A los inmigrantes se suman los refugiados que poco a poco llegan huyendo de la guerra y también de la persecución religiosa. Estas personas tienen un estatuto propio que reconoce su estado y que el Estado tiene que respetar. Nosotros debemos colaborar con las instituciones civiles para acoger de la manera más humanitaria posible a las personas refugiadas para que el tiempo que estén entre nosotros hasta que se resuelva su situación en el país se sientan acogidas y respetadas. Por último, recuerdo las necesidades de todos aquellos que han quedado en el paro laboral o no encuentran trabajo, los que no tienen posibilidades económicas para pagar la luz, la renta del piso o el alimento.
Solicito para todas estas personas vuestra aportación económica y vuestra ternura para hacer este mundo más humano y más cristiano. El Papa Francisco nos decía en la homilía de canonización de la Madre Teresa de Calcuta: “No hay alternativa a la caridad: quienes se ponen al servicio de los hermanos, aunque no lo sepan, son quienes aman a Dios (cf. 1 Jn 3,16-18; St 2,14-18). Sin embargo, la vida cristiana no es una simple ayuda que se presta en un momento de necesidad. Si fuera así, sería sin duda un hermoso sentimiento de humana solidaridad que produce un beneficio inmediato, pero sería estéril porque no tiene raíz. Por el contrario, el compromiso que el Señor pide es el de una vocación a la caridad con la que cada discípulo de Cristo lo sirve con su propia vida, para crecer cada día en el amor.”
Unámonos a la cadena de la ternura que ha puesto en marcha el Papa Francisco con sus gestos solidarios y sus palabras de misericordia. Somos muchos los que en el mundo pensamos y sentimos que el amor y la ternura son revolucionarios y calan con más profundidad que los misiles del odio de las guerras. Piénsalo bien y únete a este proyecto revolucionario para la humanidad.
En nombre de los pobres y de los voluntarios y trabajadores de Cáritas de Astorga os doy las gracias por vuestra colaboración.
Con mi afecto y bendición. + Juan Antonio, obispo de Astorga