Diócesis de Astorga

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Escuela Diocesana de Evangelizadores

03 - noviembre - 2018
  • El Primer Encuentro tendrá lugar el sábado 3 de noviembre en el Seminario de Astorga

El Programa Pastoral para el curso 2018-2019, desarrollando una de las acciones del primer reto del Plan Pastoral, propone “convocar trimestralmente a cristianos entre 20 y 50 años para formar una “escuela de evangelizadores”. Poco a poco se ha ido dando forma a los objetivos y al contenido de esta “escuela” que más bien podríamos llamarlo “seminario” porque no se trata de ofrecer una formación sistemática sino de acompañar la vocación de los laicos más comprometidos para que adquieran conciencia diocesana y se comprometan a ser “la sal y la luz del mundo”, resalta el Sr.Obispo.

El objetivo de este “Seminario para evangelizadores laicos” es “Crear una red de cristianos laicos con verdadera conciencia de su vocación y misión apostólica en la diócesis”. Como objetivos más concretos se propone que sea un espacio para:

  1.- Acompañar la vocación de los fieles cristianos laicos entre 20 y 50 años.

  2.- Profundizar en la conciencia de pertenencia a la Iglesia diocesana.

  3.- Impulsar el apostolado misionero de los laicos.

Los encuentros serán trimestrales de un día en el Seminario de Astorga en los que habrá espacio para la oración, la reflexión sobre un tema y para compartir testimonios y experiencias. Además, a los participantes se les propondrá trabajar en sus casas sobre la lectura de algún libro asequible a su preparación. Este año se les invitará a leer la Carta pastoral “Vosotros sois la sal y la luz del mundo”. El primer encuentro está fijado para el día 3 de noviembre en el Seminario de Astorga desde las 11 hasta media tarde.

El Obispo de Astorga ha pedido a los párrocos y los presidentes de las asociaciones laicales que inviten a seglares (mujeres y varones) que tengan entre 20 y 50 años, con estabilidad de vida profesional en el lugar y con verdadera adhesión al Señor y a la Iglesia. No importa que estén o no en un grupo de formación. Lo importante es que manifiesten en su vida una vinculación con la iglesia y un deseo de vivir la fe comprometidamente.