Un fin de semana muy intenso el vivido en la ciudad de ASTORGA los días 20 y 21 de abril. El Lignum Crucis, que se custodia en Santo Toribio de Liébana, dejaba por dos días su refugio a los pies de los Picos de Europa para regresar al primer lugar que lo albergó durante tres siglos en la Península Ibérica, Astorga.
La última visita a Astorga tuvo lugar los días 5 y 6 de mayo de 2018
La Conferencia preparatoria, el viernes 19 de abril en el Aula Magna del Seminario de Astorga a cargo del franciscano José María Alonso del Val abría camino para el que se sería un fin de semana muy intenso con la Santísima Cruz.
Sábado 20 de abril
Pocos días después del cierre de su puerta del Perdón y de la clausura de un Año Jubilar, el Lignum Crucis salía del santuario de Liébana para estar en Astorga los días 20 y 21 de abril. Un día gozoso el sábado 20 en el que la Santísima Cruz era recibida en Astorga, custodiada por 100 cofrades de la Santa Cruz de Liébana y portada por el obispo de Santander, Mons. Arturo Pablo Ros Murgadas, quien hizo entrega de la misma al obispo de Astorga, Mons. Jesús Fernández. Ya en el interior, tiempo de oración y adoración a la Santísima Cruz.
El trascoro de la seo asturicense estaba repleto para participar en el profundo y cargado de mensajes Viacrucis Juvenil y Cofrade escenificado con presencia del Lignum Crucis.
El prelado de Santander dirigió las Vísperas solemnes dirigidas por los voluntarios de Cáritas y con presencia de enfermos. Una vez concluidas, el Lignum Crucis partió hacia el Seminario en procesión donde pasaría toda la noche.
Domingo 21 de abril
Con toda solemnidad, acompañada por autoridades eclesiásticas, civiles y militares la Santa Cruz salió en procesión de nuevo hacia la S.A.I. Catedral, donde el obispo de Astorga presidía la Eucaristía, en la que hizo referencia a la alegría de nuestra iglesia particular por la presencia de la Santísima Cruz, en el domingo que se celebraba la fiesta de El Buen Pastor y la Jornada Mundial de las Vocaciones y Vocaciones Nativas.
Una vez terminada la celebración, D. Jesús hizo entrega al arcipreste de la Santa Cruz, D.Elias Hoyal, de la reliquia y así se puso fin a la visita en Astorga.
Por la tarde, antes de partir al santuario que la custodia, la Santísima Cruz hizo parada en la parroquia de San Justo de la Vega. Allí, se tuvo una breve oración y, el prelado asturicense descubrió una placa en recuerdo a la visita a esta parroquia tan vinculada con Santo Toribio.
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