Fiesta de San Cristóbal, patrono de los conductores- 2 de julio de 2017
Loado seas, mi Señor, también por los medios de transporte
Como todos los años, con ocasión de la celebración de la fiesta de San Cristóbal y al inicio de las vacaciones del verano, la Comisión Episcopal de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, desde el Departamento de Pastoral de la Carretera, tiene un especial recuerdo a todos los que están relacionadas con la movilidad humana: camioneros, transportistas, taxistas, conductores de autobuses, de autocares, de ambulancias, bomberos, Guardia Civil y Policía de tráfico, cofradías de san Cristóbal, asociaciones de transportistas, escuelas de conducir… Se dirigen también a las personas que cada día pasáis buena parte de vuestro tiempo al volante por razones de trabajo, por necesidad o por vacaciones o turismo. Sin olvidar a los motoristas, ciclistas y peatones que, de una u otra manera, hacen uso de las vías públicas.
José Sánchez González, presidente del Departamento de Pastoral de la Carretera de la CEE recuerda, en el mensaje que los obispos de esta comisión han elaborado para este día, que “la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico de este año y la fiesta de nuestro patrono, san Cristóbal, queremos que sean una invitación a bendecir y loar al Dios de la creación, por tanta belleza como nos regala y por la oportunidad que nos brinda de contemplarla. Y queremos hacerlo con la sencillez de san Francisco en su Cántico de las criaturas.” […]
“Nuestra invitación a dar gracias y alabar a Dios por lo positivo de los medios de comunicación y de transporte no puede hacernos olvidar la posibilidad, por desgracia frecuente realidad, del mal uso de los mismos, con las graves consecuencias de no poco dolor y muerte en la sociedad moderna.” […]
“En nuestra actitud, gozosa y agradecida, de los medios de transporte, a la hora de usarles en nuestros desplazamientos, tengamos siempre presente que «¡toda vida es sagrada!» también la nuestra, de la que no somos dueños absolutos.” […] “Apelamos, pues, a la responsabilidad de cada uno, para que entre todos hagamos realidad la gran utopía de cero accidentes, cero muertes en nuestras carreteras.” […]