“Educar para acoger el don de la vida” es el lema con el que se celebrará el 9 de abril, solemnidad de la Anunciación del Señor, la Jornada por la Vida. Los obispos de esta Subcomisión, firman un mensaje en el que recuerdan que “el Magisterio de la Iglesia nos invita a recibir el don de la vida, a tomar conciencia de él. No podemos darlo por supuesto, sino más bien ponderar su significado y acogerlo responsablemente. Hemos de reflexionar sobre la vida como un don para entender de qué manera guiamos nuestra propia vida”.
La familia, santuario de la vida La familia es el santuario de la vida porque es el único lugar en el que cada uno es querido por sí mismo, independientemente de su currículum, sus cualidades, sus logros, de lo que tenga o deje de tener. Y esto permite a los miembros de la familia sentir una seguridad, una estabilidad y una libertad que no tienen parangón.
En la familia se aprende a valorar la vida cada vez que hay un embarazo y se recibe la nueva vida con alegría, aunque sea inesperada. Como afirma el papa Francisco: «Es tan grande el valor de una vida humana, y es tan inalienable el derecho a la vida del niño inocente que crece en el seno de su madre, que de ningún modo se puede plantear como un derecho sobre el propio cuerpo la posibilidad de tomar decisiones con respecto a esa vida, que es un fin en sí misma y que nunca puede ser un objeto de dominio de otro ser humano. La familia protege la vida en todas sus etapas y también en su ocaso»
“Educar para acoger el don de la vida” es el lema elegido este año por la Conferencia Episcopal con motivo de la celebración de la Jornada por la vida el próximo 9 de abril. Pero, ante la dificultad que puede suponer hacer una celebración de carácter diocesano en lunes -ya que deseamos que pueda acudir el mayor número de familias posible- hemos programado el acto central un día antes, el domingo 8 de abril.
De este modo, desde la Delegación de Familia y Vida animamos a participar a todas las personas que puedan en la celebración del Vía Lucis, que se celebrará a las 18 horas del domingo 8 de abril en la parroquia de Santa Rita de O Barco de Valdeorras.
Junto con esta celebración animamos también a todas las parroquias y a todas las personas que lo deseen a que los rosarios de cada lunes, al menos durante el tiempo de Pascua, se apliquen por la defensa y dignidad de la vida.
El magisterio de la Iglesia nos invita a tomar conciencia del don de la vida en un momento en el que la sociedad nos ofrece visiones reductivas. Pero toda vida humana es única, irrepetible, valiosa y digna para Dios. Recogemos este guante que nos lanza la sociedad y reconocemos a la familia como santuario de la vida, entorno de protección y acogida tanto para los que ya forman parte de ella como para los que están por nacer. Y os animamos a participar en las actividades propuestas para esta celebración.
Delegación diocesana de Familia y Vida