Diócesis de Astorga

Noticias

JORNADA PRO ORANTIBUS 2021

30 - mayo - 2021

SOLEMNIDAD DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD

- 30-mayo-2021-

En el Amor del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, la Solemnidad de la Santísima Trinidad, celebramos la Jornada de la Vida Consagrada Contemplativa. La VIDA CONTEMPLATIVA es la mirada enamorada, la mirada de amor a Jesús, el Señor traspasado por los pecados del mundo en la cruz y vencedor de la muerte por su Resurrección. La luz del amor contemplativo es la fe en Jesucristo exaltado a la derecha de Dios Padre. Y por la acción del Espíritu Santo nos arrastra tras Él con la esperanza de darle alcance en la Gloria del Cielo. Gloria que << “Ni ojo vio, ni oído oyó, ni el hombre puede pensar lo que Dios ha preparado para los que lo aman”. Y Dios nos lo ha revelado por el Espíritu>> (1Corintios 2,9-10a). El corazón de la Vida Contemplativa es Jesucristo “Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado no creado, de la misma naturaleza del Padre” (Credo niceno-constantinopolitano).

Esta mirada de fe enamorada de la Vida Contemplativa nos recuerda que Jesús de Nazaret no es el “máximo representante” de Dios en el mundo de las religiones y del diálogo interreligioso. Cristo Jesús es Dios encarnado, Dios humanado, Dios con los hombres, quien “siendo de condición divina… se despojó de sí mismo, tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres… obediente hasta la muerte y muerte de cruz” (Filipenses 2,6-8). Si no fuese que “el Verbo era Dios… y se hizo carne” (Jn 1,1.14), entonces no habría motivo para la Vida Consagrada, especialmente para la Contemplativa, en este mundo nuestro. La Vida Contemplativa nos está gritando que el “creer” está por encima del “hacer” (cf. Lc 10,38-42). Y nos ayuda a ver que la misión de la Iglesia no es adaptar el Evangelio tan indigesto de Jesucristo a la cultura, sino evangelizar la cultura dominante tan indigesta para toda la humanidad.

La Vida Contemplativa es “Faro” (VDQ, 36) en la noche oscura de increencia cultural. En nuestro contexto social de fe católica débil Jesucristo es “el Dios desconocido” (Hechos 17,22-31). Pero la Vida Contemplativa, corazón orante de la Iglesia, nos grita con su vida que Jesús de Nazaret es el Hijo amado de Dios, que “tanto amó al mundo, que entregó a su Unigénito, para que todo el que cree en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él” (Jn 3,16s).

“La Vida Contemplativa, cerca de Dios y del dolor del mundo” (Lema de la Jornada, 30-05-21), también es una mirada compasiva al sufrimiento humano en nuestros tiempos de pandemia. El Covid-19 va destapando una realidad estructural de iniquidad con múltiples víctimas y no sólo fallecidos. Fruto también de esta realidad estructural de iniquidad es el cambio climático y las guerras, causantes de tantos desplazamientos humanos en nuestra tierra maltratada.

En nuestra Iglesia Particular de Astorga la Vida Contemplativa se concentra en: Madres Agustinas (Convento de San José, -Año de San José-, Villafranca del Bierzo). Madres Cistercienses, (San Miguel de las Dueñas). Madres Clarisas, (Astorga y Villafranca, La Anunciada -Sepulcro de San Lorenzo de Brindis-). Madres Concepcionistas (Ponferrada y Villafranca). Madres Franciscanas de la TOR (Astorga). Madres Redentoristas (Astorga). Madres Premostratenses (Casa Sacerdotal Astorga) Padres Benedictinos (Rabanal del Camino). Padres Premonstratenses (Villoria de Órbigo). En la JORNADA “PRO ORANTIBUS” oremos por quienes oran siempre, e interceden por el mundo entero.

P. Manuel Blanco M.

Delegado para la Vida Consagrada.

 

 

DESTACADOS