Personal de la parroquia se encarga de la apertura del templo a expensas de la firma del convenio de colaboración
La iglesia de Santa Marta de Tera abre sus puertas al público el próximo sábado para contemplar el fenómeno de la luz equinoccial.
La parroquia tiene previsto abrir desde las 08,30 horas de este sábado 18 de marzo con el fin de que los curiosos puedan visualizar el rayo luminoso que se proyecta sobre el capitel más famoso del camino jacobeo, unos minutos antes y minutos posteriores a las 09,00 horas de las jornadas previas y posteriores a la entrada de la primavera. Los visitantes podrán aprovechar también para conocer las piezas que alberga el museo parroquial o del camino jacobeo que se ubica en la planta superior del edificio anejo al templo, el que fuera antiguo palacio de los obispos de Astorga.
Personal de la parroquia de Santa Marta de Tera se encarga de la apertura del edificio religioso a expensas de la firma del convenio, prevista para estos días y que anualmente realizan entre el Ayuntamiento, el Patronato de Turismo y Parroquia.
Desde este próximo sábado, en las jornadas previas al lunes 20 de marzo, se contempla el fenómeno de la luz proyectado sobre el capitel. Es precisamente el lunes día 20 de marzo cuando comienza en el hemisferio norte la primavera astronómica y ello a partir de las 06,28 horas. Esta es la fecha en la que el día y la noche son iguales.
El rayo de la luz equinoccial que fuera divulgado en sus orígenes por el fallecido párroco Julián Acedo, consiste en la lenta proyección del fenómeno luminoso sobre la figura del más importante capitel historiado del presbiterio y que se halla sobre la columna izquierda, la que soporta el arco de triunfo del mismo. Una figura tallada en la piedra y que representa posiblemente el alma de Santa Marta elevándose a los cielos, aunque algunos estudiosos lo quieren vincular al Resucitado pero no pocos teólogos discuten esta última acepción icónica.
El rayo solar se adentra por la ventana u óculo situado en el centro de la parte superior del frontal del presbiterio hasta llegar al capitel más famoso del camino jacobeo. Un fenómeno que reune anualmente a numerosos curiosos, tanto en el equinoccio de la primavera como en el del otoño.
M.A.CASQUERO