Es acción que se les propone los sacerdotes diocesanos para la donación de la nómina de un mes o participar con una aportación única o periódica con el fin de ayudar a más largo plazo a la labor que realiza Cáritas, la cual se prevé decisiva para muchas personas, familias y colectivos vulnerables por la crisis socio-económica que ha provocado la pandemia.
También pueden colaborar en esta iniciativa las comunidades religiosas, cofradías, asociaciones eclesiales y laicos con la aportación que deseen.